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Volkswagen Deportivo

Fiel a  su concepción de  fabricante de coches  elegantes, seguros y fiables, Volkswagen no cuenta con ningún modelo que pueda considerarse estrictamente un coche deportivo, aunque la marca ha realizado un tremendo esfuerzo por adaptarse a los tiempos y poder ofrecer opciones a todos los conductores, sean cuales  sean sus gustos en conducción. Fruto de  ese  esfuerzo nacen el Scirocco y las nuevas versiones del clásico Beetle.

Volkswagen Scirocco

El Scirocco es un coche que transmite sensación de  velocidad incluso estando parado, gracias a la altura que tiene en relación a su largo y ancho (sólo 1,3 metros, por 4,2 de largo y 1,8 de  ancho). La carrocería coupé ayuda a ampliar aún más ese efecto.

Pero el carácter deportivo del Scirocco no procede sólo de su imagen: con motores de hasta 150 CV con doble embrague DSG de 6 velocidades y la posibilidad de equiparlo con los mejores sistemas de ayudas a la conducción, como la cámara trasera Rear View, y las opciones de infotainment disponibles, el vehículo no tiene nada que envidiar al resto de modelos de su segmento.

Podríamos pensar que un coche de  estas características resultaría excesivamente caro, pero lo cierto es que el Scirocco disfruta de unos precios contenidos, que parten de 28.890 euros en el acabado más caro, el que incluye motor diésel 2.0 TDI.

Volskwagen Beetle

Estamos de acuerdo en que el Beetle no es un deportivo al uso. De hecho, es posible que algunas de  sus versiones ni siquiera puedan entrar dentro de esta denominación, pero también es cierto que las versiones R-Line y Dune, gracias a sus acabados y motorizaciones, unidos a la estética clásica del compacto, nos permiten incluirlo dentro de la selección de vehículos más sport de la casa alemana.

El Beetle R-Line puede equipar un motor 2.0 TSI de 220 CV con cambio semiautomático de 6 velocidades,  que unido a una amplia gama de colores efecto perla y la posibilidad de instalar techo deflector o corredizo panorámico de cristal, entre otras posibilidades de personalización, convierten al vehículo en un pequeño deportivo ágil y llamativo por la ciudad.

Por su parte, el Beetle Dune, con su spoiler  trasero de serie, 5 motorizaciones, llantas combinadas con el color de la carrocería y paquete de vinilos exteriores decorativos acordes con las posibilidades de personalización del interior, recoge toda la  estética de los deportivos clásicos unida  a las más modernas prestaciones.

En definitiva, aunque Volkswagen no sea la primera marca que nos viene a la mente al hablar de coches deportivos, sus coches garantizan un sobrado cumplimiento de los requerimientos del conductor para estos vehículos.

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